El tomate es uno de los principales vegetales que encontramos en nuestro huerto. A quién no le gustaría sembrar tomates en verano. Cosechar un rico y jugoso tomate muy rojo y brillante, ya sean ensaladas, hervidos, salsas o asados.
Pero el verano es sinónimo de exceso de calor y luz solar.
¿Qué cuidados debemos tener de estos factores, a la hora de sembrar nuestros tomates en el verano?
Escoge bien tus semillas; ya sea que las compres de paquete o la adquieras a través de frutos de un mercado de vegetales directo. Debes escoger semillas que sean factibles para que puedan resistir en el ambiente de tu Huerta.
En el verano, o estación seca en Panamá, ciertos cultivos no son los más apropiados para sembrarlos, dado la falta de agua y el alto nivel de calor. Cultivos como el tomate, pimentón, maíz, cebolla, sandía, melón, pepino serán los más aptos para estas condiciones climáticas.
Las recomendaciones más importantes son el tiempo de exposición al alto nivel de luz solar. Por eso se pudieran usar ciertas mallas de sombra (saran) para garantizar poder pasar luz pero no tan alto nivel de radiación.
El riego; y la frecuencia con que se haga el riego, evitarán el estrés térmico e hídrico a que someten las plantas en la temporada de verano. Es bueno regar temprano en la mañana y al atardecer. Si cuentas con un sistema de riego por goteo mucho mejor.
Podrás distribuir el riego a lo largo del día en periodos cortos para mantener la humedad del suelo en niveles apropiados. Cada cultivo tiene un requerimiento de riego específico. Una planta como la sandía requiere de un riego más continuo o humedad en su sustrato.
¿Cómo vas a cuidar tus tomates en la temporada de alto calor?
Por ejemplo, en Panamá podremos encontrar temperatura arriba de los 35 grados centígrados y hasta arriba de 42 grados centígrados en ciertos momentos; con niveles de humedad de 75% o más y luz solar intensa de casi 12 horas. Esto pudiera afectar las plantas de tomate de forma considerable.
¿Cómo cuidar tus tomates en la temporada de verano?
El riego
Lo mejor es que tengas para los tomates un riego aproximadamente de un día por medio. Pero que sea un riego abundante. Las plantas de tomates requieren bastante agua. Pero no se requiere que los encharques todos los días. Esto hará proliferar los hongos y otros tipos de plagas en tu planta. Hasta se pudrirán las raíces. Usa unos dos litros de agua por planta diario.
Es por eso que nosotros hacemos un riego por goteo periódico un día por medio en temporada de sol o verano. Esto podría ser variable de acuerdo a la permeabilidad y retención de humedad del sustrato utilizado.
La luz y radiación
Una planta de tomate requiere también luz por más de 10 horas al día. Esto se logra evitando sombras con paredes, muros, árboles u otros o plantas que pudieran dar sombra.
Si bien es cierto, que el tomate es una planta que requiere mucho sol, hay momentos en que el alto nivel de calor en la etapa de floración no permite que las flores se conviertan en frutos (fecundación). Entonces no tendrás producción de frutos por más verde y vigorosa que esté la planta de tomate, ya que no se da la fecundación en las flores.
Si notas que el calor que está teniendo está arriba de los 35 grados centígrados, es mejor usar una malla de sombra de 80%. Estas mallas de saran se colocan de diferentes maneras. Puede ser con toldo (carpa), con hilos o cables. De esta manera la planta no esté sometida al calor supremo del día. Y se regulará el nivel de luz apropiado para la planta.
Lo mismo ocurre con los pimentones. Los pimentones son una planta también del tipo que necesita mucho, mucho sol. Pero el alto nivel de luz y calor, radiaciones por arriba de los 35 grados centígrados hace que no haya producción de las flores ya que no van a «cuajar» los frutos.
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